PÁGINAS DE INTERÉS

LAS VIANDAS DEL CRISTIANO


 
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MENSAJE DOMINGO 18/01/2015

Por el Hno. Gabriel.-

Hechos 15
28 Porque ha parecido bien al Espíritu Santo, y a nosotros, no imponeros ninguna carga más que estas cosas necesarias:
29 que os abstengáis de lo sacrificado a ídolos, de sangre, de ahogado y de fornicación; de las cuales cosas si os guardareis, bien haréis. Pasadlo bien.

Una de las disyuntivas que atraviesa el cristiano a lo largo de su vida tiene que ver con las viandas, para ser un poco más específicos la cuestión a resolver aquí es: ¿Qué clase de comidas puede comer el cristiano y cuáles son las comidas que no debe comer? La cita bíblica recién leída ha generado desde largo tiempo dos posturas en la vida cristiana respecto de este asunto, están los que afirman que las palabras expresadas en Hechos 15:28 y 29 siguen vigente al día de la fecha y por lo tanto el cristiano debe abstenerse de comer sangre y cumplir este mandato a rajatabla, y por otro lado  están los que consideran que tal mandato no se aplica hoy por hoy a la vida cristiana y por lo tanto pueden comer comidas elaboradas con sangre.

Aunque para algunos esta cuestión pueda ser algo que carezca de importancia (irrelevante), sin embargo ha sido un tema de gran conflicto dentro de las iglesias y causal de múltiples disputas entre cristianos que en algunos casos concluyo de muy mala manera, con enemistades y desvinculaciones extremas de unos con otros y esto solo por causa de las viandas.

La idea de esta meditación no es imponer una postura, sino analizar las dos a la luz de las escrituras para saber cómo debemos proceder en este asunto.

Esta cuestión de las viandas, respecto de “que se puede comer y que no se debe comer” ¿nos involucra a nosotros de alguna manera? la respuesta es SI, ya que en nuestra cultura este conflicto se origina al momento que el cristiano decide cocinar el popular “asado de carne a la parrilla”, y por supuesto nunca faltan los embutidos entre los cuales están las conocidas y cuestionadas “morcillas” (conocida también en otros países como “moronga”, “rellena”, “sangrecita”, “prieta”), embutidos que todos saben se fabrican a base de sangre de cerdo, y es aquí donde se origina el problema, porque algunos apoyados en la cita bíblica de Hechos 15:29 consideran que tal alimento al estar elaborado con sangre está totalmente prohibido para el cristiano, por lo tanto los que las comen están incurriendo en un pecado, y por otro lado está la otra parte que considera que comer tal alimento no es pecado sino una cuestión de conciencia y por lo tanto lo come. La cuestión puntual para el cristiano de esta región entonces sería: ¿Puede el cristiano comer morcilla? ¿Puede comer alimentos elaborados con sangre?

EL CONTEXTO DE HECHOS 15
Si el eje central de este conflicto ha sido la interpretación que se le dio a la cita bíblica de Hechos 15:29, lo primero que vamos a hacer entonces es analizar esta cita bíblica con todo su contexto para conocer cómo es que se llegó a establecer tales mandatos para la iglesia primitiva.

Hechos 15
1 Entonces algunos que venían de Judea enseñaban a los hermanos: Si no os circuncidáis conforme al rito de Moisés, no podéis ser salvos.
2  Como Pablo y Bernabé tuviesen una discusión y contienda no pequeña con ellos, se dispuso que subiesen Pablo y Bernabé a Jerusalén, y algunos otros de ellos, a los apóstoles y a los ancianos, para tratar esta cuestión.

Los dos primeros versos de este capítulo nos dan a conocer de forma clara y concisa cual fue el motivo por el cual se convoco a un concilio en Jerusalén, o sea que la cuestión a tratar en aquel concilio no tenía que ver con las viandas como cosa primera sino con una cuestión respecto de la salvación de los gentiles los cuales algunos judíos afirmaban que para que la salvación de los tales sea confirmada debían circuncidarse y guardar la ley de Moisés, cosa que tanto Pablo como Bernabé resistieron porque entendían que la salvación era y es por la gracia de Dios (Hch 15:11) y que la ley de Moisés había quedado caduca.

De hecho los versículos que continúan desde el 3 al 21 giran en torno a esta temática, la cual debía ser resuelta en Jerusalén porque allí estaban los apóstoles de Jesús y ancianos con la autoridad de Cristo que podían dar una respuesta a este asunto, y observamos también que aun allí tal como lo relata el verso 5 habían algunos fariseos que habían creído pero a su vez consideraban que la circuncisión y la ley de Moisés seguían vigente y debían guardarse, por esta razón reunidos los apóstoles y los ancianos de la iglesia (verso 6) después de mucha discusión se remitieron a los testimonios y obra del Espíritu Santo en los gentiles los cuales evidenciaban que Dios había derramado su gracia tanto en los judíos como en los gentiles y que ninguna diferencia había hecho entre unos y otros sino que a ambos les había concedido el Espíritu Santo (Hch 15:9), frente a tales evidencias Santiago, hermano del Señor Jesús el cual era anciano en Jerusalén y considerado columna de la iglesia en este lugar (Gal 2:9) confirmo tales palabras mostrando que la obra de Dios se iba a expandir tanto en judíos como gentiles porque esto era lo que había sido anunciado por los profetas ya de tiempos antiguos, por lo tanto no había ninguna razón para que se inquiete a los gentiles a que se circunciden y guarden la ley mosaica sino solamente darles ciertas instrucciones y mandamientos para que sepan cómo proceder en su forma de vida a fin de que su andar no sea según su costumbre o cultura pagana sino conforme al agrado de Dios.

O sea que la asamblea concluyó en que Dios había abierto la puerta de la fe a los gentiles, aparte de cualquier observación a la Ley de Moisés, lo que había sido la cuestión principal a tratar en este concilio luego de un largo tiempo de debate quedo resuelta, pero además de esto surgió también otra cuestión a resolver en el mismo concilio, el cual era como debía ser el proceder de los gentiles convertidos en su forma de vida, por esta razón se escribieron cartas instruyendo a los gentiles que a partir de aquella decisión debían abstenerse de ciertas cosas tal como se describe en los versos 28 y 29 del capítulo 15, y esta instrucción NO radicaba en una cuestión para la salvación de ellos sino en una cuestión de convivencia entre judíos y gentiles.

EL PROBLEMA DE LOS JUDIOS Y GENTILES
¿Porque fue necesario dar estas instrucciones a los gentiles?
Nosotros leemos en hechos 15:10 que Pedro dice que no debían tentar a Dios poniendo sobre los gentiles el yugo de la ley mosaica que ni ellos ni sus padre pudieron llevar, pero luego Jacobo el hermano del Señor dice que se les de ciertas instrucciones de cómo conducirse ¿Por qué?

No debemos ignorar que los cristianos del primer siglo tuvieron que enfrentar las diferencias culturales que separaban a los cristianos judíos de los cristianos gentiles, porque los cristianos judíos si bien entendían que la ley había sido abolida por Cristo de todos modos tenían un profundo respeto hacia la ley de Moisés porque esta formaba parte de su desarrollo cultural, ellos estaban habituados a esta ley como su forma de vida porque habían sido enseñados y educados en ella desde la niñez, sin embargo los cristianos gentiles que se convertían a Dios desconocían totalmente la ley de Moisés y por tanto su proceder y conducta difería totalmente a la del judío porque ellos naturalmente arrastraban sus propias costumbres y conductas culturales que se les habían inculcado desde su niñez, y esto generó un desafío para la iglesia primitiva porque debían regular una forma de vida santa para los gentiles pero sin revivir la ley de Moisés en la vida de ellos como lo deseaban los fariseos. Cabe destacar que aun no contaban con el nuevo testamento como reglamento de vida.
Los historiadores de la biblia y también los universales relatan que las fiestas de adoración paganas y cultos idolátricos que realizaban los gentiles (antes de ser cristianos) a menudo incluían el sacrificio de animales y la ingestión de carne, ofreciéndose algunas veces la sangre escurrida en un plato como parte del menú. Estas festividades también incluían generalmente la participación sexual del invitado en diferentes actividades inmorales, y aunque para el judío y aun para nosotros esto es visto como un pecado aberrante sin embargo para esta gente de ningún modo estaba mal sino que formaba parte de la adoración a su dios, porque en su desarrollo cultural no tenían ninguna ley que les prohíba tales cosas sino antes por el contrario, se fomentaba el libertinaje, (no muy diferente a los israelitas en el desierto cuando hicieron el becerro de oro, y también a los hijos de Elí que dormían con las mujeres que velaban a la puerta del tabernáculo).

Por tanto, para entender el contexto de las prohibiciones establecidas en el concilio, se debe entender su conexión con las prácticas paganas idolátricas, ya que evidentemente la forma de vida del cristiano gentil aun arrastraba ciertas conductas paganas que debían ser corregidas inmediatamente, es allí donde los judíos fariseos querían establecer la ley de Moisés como forma de vida porque les parecía repugnante la conducta de los gentiles.

Pero lo importante a destacar es que las prohibiciones establecidas en el concilio de Jerusalén buscaban establecer un parámetro de vida para el gentil en función de sus antiguos hábitos y conductas paganas e idolátricas, porque un gentil convertido a Cristo debía convivir en medio de una sociedad pagana que seguía manteniendo sus hábitos y conductas pecaminosas (no muy diferente a los cristianos de hoy) sin embargo para que su conversión sea genuina y no caiga en descredito se les instruyo a los gentiles a que ya no participen de ninguna actividad que esté relacionada con lo sacrificado a los ídolos paganos, entre las cuales se mencionan el comer la sangre, como también la carne ahogada en su sangre y la fornicación. Volvemos a recordar que en este tiempo los gentiles no contaban con el nuevo testamento como patrón de vida, no tenían el evangelio de Mateo y más precisamente Mateo 5. 6 y 7 el cual es el manual del cristiano de hoy, todo se trasmitía verbalmente.  

LA APLICAICON DE ESTAS PROHIBICIONES HOY
Sin embargo este asunto presenta una cuestión a resolver para los cristianos del siglo veintiuno. ¿Todavía se aplican estas reglas? ¿Fueron estas reglas para los gentiles de ese tiempo nada más? Si todavía se aplican, ¿cómo pudieran los cristianos del siglo veintiuno obedecer estos mandamientos? Porque uno quizás está habituado a la prohibición de la morcilla porque es un alimento elaborado a base de sangre, ¿pero que del ahogado?, ¿Cómo podemos evitar el “ahogado”?, porque los detalles de la matanza y preparación de los animales como el pollo y otras aves y carnes que se disponen en los supermercados no se dan a conocer al público, por esta razón PREGUNTO: ¿Cómo sabemos que el pollo que compramos en un supermercado o en la pollería misma no fue sacrificado a los ídolos? ¿Como sabemos que su matanza no fue ahogado en su sangre? ¿Cómo sabemos que la carne del asado que compramos en una carnicería no fue sacrificada a buda, o alá, o a la pacha mama? La prohibición entonces para los cristianos de hoy  no solo debe girar en torno a la morcilla, sino que pone en duda todo lo que comemos, ¿Qué debemos hacer entonces, tener nuestra propia carnicería? ¿Hacer todas las averiguaciones necesarias antes de comprar? Y aun más, ¿Qué pasa con las trasfusiones de sangre? Porque no ingerir sangre debe referirse a todos los modos en que esta pueda ingresar al cuerpo...

1° Corintios 8
4  Acerca, pues, de las viandas que se sacrifican a los ídolos, sabemos que un ídolo nada es en el mundo, y que no hay más que un Dios.
5  Pues aunque haya algunos que se llamen dioses, sea en el cielo, o en la tierra (como hay muchos dioses y muchos señores),
6 para nosotros, sin embargo, sólo hay un Dios, el Padre, del cual proceden todas las cosas, y nosotros somos para él; y un Señor, Jesucristo, por medio del cual son todas las cosas, y nosotros por medio de él.
7 Pero no en todos hay este conocimiento; porque algunos, habituados hasta aquí a los ídolos, comen como sacrificado a ídolos, y su conciencia, siendo débil, se contamina.
8 Si bien la vianda no nos hace más aceptos ante Dios; pues ni porque comamos, seremos más, ni porque no comamos, seremos menos.
9  Pero mirad que esta libertad vuestra no venga a ser tropezadero para los débiles.
10 Porque si alguno te ve a ti, que tienes conocimiento, sentado a la mesa en un lugar de ídolos, la conciencia de aquel que es débil, ¿no será estimulada a comer de lo sacrificado a los ídolos?
11  Y por el conocimiento tuyo, se perderá el hermano débil por quien Cristo murió.
12  De esta manera, pues, pecando contra los hermanos e hiriendo su débil conciencia, contra Cristo pecáis.
13 Por lo cual, si la comida le es a mi hermano ocasión de caer, no comeré carne jamás, para no poner tropiezo a mi hermano.

La verdad es que comer morcilla no nos hace menos acepto delante de Dios y no comerla no nos convierte en mas santo para con Dios, ni tampoco tomarse el trabajo de investigar la procedencia de todas las carnes que comemos a fin de conocer la forma en la que los animales fueron sacrificados en el matadero, si ahogado o no, como también investigar si fueron consagrados a algún ídolo, antes debemos entender que todas las cosas que hay en la tierra pertenecen al creador, porque de Él es la tierra y su plenitud, pero a su vez a fin de que no sea un tropiezo para nadie el apóstol Pablo también escribe que si estamos reunidos con algún hermano que recién se convierte y luego un incrédulo nos ofrece comida y luego dice que tal comida fue consagrada como ofrenda a la pacha mama entonces por causa de la conciencia del hermano recién convertido debemos tomar ciertos recaudos

1° Corintios 10
23  Todo me es lícito, pero no todo conviene; todo me es lícito, pero no todo edifica.
24  Ninguno busque su propio bien, sino el del otro.
25 De todo lo que se vende en la carnicería, comed, sin preguntar nada por motivos de conciencia;
26  porque del Señor es la tierra y su plenitud.
27  Si algún incrédulo os invita, y queréis ir, de todo lo que se os ponga delante comed, sin preguntar nada por motivos de conciencia.
28  Mas si alguien os dijere: Esto fue sacrificado a los ídolos; no lo comáis, por causa de aquel que lo declaró, y por motivos de conciencia; porque del Señor es la tierra y su plenitud.

Tanto Pablo como el resto de los apóstoles y los primeros cristianos tuvieron que ocuparse en regularizar ciertas conductas y situaciones que se prestaban en la vida de los cristianos gentiles, por esta razón Pablo escribe en más de una ocasión referido a este tema, ya que para algunos este asunto respecto de que se puede comer y que no se debe comer podía tomarse como una ofensa a Dios y en otros era más liberal, sin embargo algunos llevaban este tema al extremo al punto tal de valorar más las conductas y rudimentos que la sangre de Cristo sobre sus vidas, en algunos casos imagino que le daban más valor a las viandas que a la sangre de Cristo derramada en la cruz.

Colosenses 2
16  Por tanto, nadie os juzgue en comida o en bebida, o en cuanto a días de fiesta, luna nueva o días de reposo,
17  todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo.

Evidentemente esta cuestión ya de antes se prestó para innumerables contiendas que Pablo mismo inspirado por el Espíritu Santo tuvo que regular mediante cartas a las iglesias, entre las cuales leemos en la carta a los romanos como se les instruyó a los cristianos respecto de cómo proceder en el asunto, a fin de que el asunto no termine en una contienda.
Romanos 14
1 Recibid al débil en la fe, pero no para contender sobre opiniones.
2  Porque uno cree que se ha de comer de todo; otro, que es débil, come legumbres.
3  El que come, no menosprecie al que no come, y el que no come, no juzgue al que come; porque Dios le ha recibido.
4 ¿Tú quién eres, que juzgas al criado ajeno? Para su propio señor está en pie, o cae; pero estará firme, porque poderoso es el Señor para hacerle estar firme.
5 Uno hace diferencia entre día y día; otro juzga iguales todos los días. Cada uno esté plenamente convencido en su propia mente.
6  El que hace caso del día, lo hace para el Señor; y el que no hace caso del día, para el Señor no lo hace. El que come, para el Señor come, porque da gracias a Dios; y el que no come, para el Señor no come, y da gracias a Dios.
7  Porque ninguno de nosotros vive para sí, y ninguno muere para sí.
8  Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos, o que muramos, del Señor somos.
13  Así que, ya no nos juzguemos más los unos a los otros, sino más bien decidid no poner tropiezo u ocasión de caer al hermano.
14 Yo sé, y confío en el Señor Jesús, que nada es inmundo en sí mismo; mas para el que piensa que algo es inmundo, para él lo es.
15  Pero si por causa de la comida tu hermano es contristado, ya no andas conforme al amor. No hagas que por la comida tuya se pierda aquel por quien Cristo murió.
16  No sea, pues, vituperado vuestro bien;
17 porque el reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo.
18  Porque el que en esto sirve a Cristo, agrada a Dios, y es aprobado por los hombres.
19  Así que, sigamos lo que contribuye a la paz y a la mutua edificación.
20  No destruyas la obra de Dios por causa de la comida. Todas las cosas a la verdad son limpias; pero es malo que el hombre haga tropezar a otros con lo que come.
21 Bueno es no comer carne, ni beber vino, ni nada en que tu hermano tropiece, o se ofenda, o se debilite.
22 ¿Tienes tú fe? Tenla para contigo delante de Dios. Bienaventurado el que no se condena a sí mismo en lo que aprueba.
23  Pero el que duda sobre lo que come, es condenado, porque no lo hace con fe; y todo lo que no proviene de fe, es pecado.

CONCLUCIÓN
Con todo lo leído está claro que aquel concilio llevado a cabo en Jerusalén no buscaba imponer de forma rigurosa una dieta para el cristiano sino evitar la contaminación idolátrica que existían en aquel tiempo con los gentiles, ya que habituados a su costumbre pagana estaban en constante contacto con prácticas de sacrificio de animales, consumo de sangre de modo ritual y fiestas inmorales. Por tanto nuestra mirada del asunto no debe ser legalista respecto del tema sino objetiva, porque si caemos en el habito de imponer estas normas la verdad es que no podremos comer nada de la carnicería sin antes hacer la averiguaciones pertinentes para descartar que hayan sido ofrecidas y consagradas a ídolos, como la pacha mama para esta región o la llamada virgen de urkupiña, o también conocer si los mismos fueron desangrados o ahogados en su sangre, porque si es así deberíamos dejar de comer esos filetes jugosos y empezar a comer charqui…

Tampoco digo que debemos irnos al otro extremo y empezar a consumir sangre y toda clase de comidas raras por el solo hecho de hacer la contra, porque la verdad es que la sangre no es un alimento, debemos por lo tanto actuar con prudencia en ambos sentidos, con una balanza equilibrada
Si alguien desea cuidarse de comer sangre tal como dice la escritura para el Señor lo hace, y si alguien considera comer alimentos elaborados con sangre para el Señor lo hace, ni uno es mas ni el otro menos, pero si es importante marcar que antes de cuidarse de la sangre de los animales hay que cuidarse de no pisotear la sangre de Cristo, porque es verdad que a veces por causa de la comida se generan contiendas que dejan contristados a los hermanos, por lo cual antes de cuidarse de los alimentos hay que amar al prójimo.

Marcos 7
14  Y llamando a sí a toda la multitud, les dijo: Oídme todos, y entended:
15  Nada hay fuera del hombre que entre en él, que le pueda contaminar; pero lo que sale de él, eso es lo que contamina al hombre.
16  Si alguno tiene oídos para oír, oiga.
17  Cuando se alejó de la multitud y entró en casa, le preguntaron sus discípulos sobre la parábola.
18  El les dijo: ¿También vosotros estáis así sin entendimiento? ¿No entendéis que todo lo de fuera que entra en el hombre, no le puede contaminar,
19  porque no entra en su corazón, sino en el vientre, y sale a la letrina? Esto decía, haciendo limpios todos los alimentos.
20  Pero decía, que lo que del hombre sale, eso contamina al hombre.
21  Porque de dentro, del corazón de los hombres, salen los malos pensamientos, los adulterios, las fornicaciones, los homicidios,
22 los hurtos, las avaricias, las maldades, el engaño, la lascivia, la envidia, la maledicencia, la soberbia, la insensatez.
23  Todas estas maldades de dentro salen, y contaminan al hombre.

Hebreos 13
9  No os dejéis llevar de doctrinas diversas y extrañas; porque buena cosa es afirmar el corazón con la gracia, no con viandas, que nunca aprovecharon a los que se han ocupado de ellas.

Por último, no está demas recordar que cada vez que nos sentamos a la mesa para ingerir alimentos lo hacemos previa oración antes, por lo tanto si pedimos que el Señor bendiga los alimentos debemos de confiar que lo hace sobre la totalidad de ellos, de otro modo nuestra oración debería ser selectiva, por ejemplo; “Señor santifica este asado menos la morcilla” pero sabemos que no es así, sino que la acción de gracia es sobre todo alimento que ponemos sobre nuestra mesa.

1° Timoteo 4
2  por la hipocresía de mentirosos que, teniendo cauterizada la conciencia,
3  prohibirán casarse, y mandarán abstenerse de alimentos que Dios creó para que con acción de gracias participasen de ellos los creyentes y los que han conocido la verdad.
4 Porque todo lo que Dios creó es bueno, y nada es de desecharse, si se toma con acción de gracias;
porque por la palabra de Dios y por la oración es santificado.

Para concluir, si el conflicto de cristiano de hoy es ¿puedo o no comer morcilla? ¿Es un pecado hacerlo? La verdad no peca el que lo hace y no es mejor el que no lo hace, la cita bíblica de Hechos 15:28 y 29 no se refiera a esta clase de prohibiciones sino a lo que tenía que ver con lo sacrificado a los ídolos, el cual era un asunto más ritual de contaminación espiritual. Lo que también es importante destacar es que la sangre en si no es un alimento.-


La paz del Señor Jesucristo.-

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  2. Hola soy de Salta y tambienn estoy revisando mis creencias alimenticias en base a los mandamientos del Señor. muy interesante lo que enseña el siguiente video al respecto. https://www.youtube.com/watch?v=XEn4pLXySME
    Saludos

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