PÁGINAS DE INTERÉS

VIDA NUEVA, ALIMENTO NUEVO, PAN NUEVO




MENSAJE DOMINGO 30/06/2013

Génesis 3
19  Con el sudor de tu rostro comerás el pan hasta que vuelvas a la tierra, porque de ella fuiste tomado; pues polvo eres, y al polvo volverás.
     
      Luego de la caída (la desobediencia) del hombre, la vida terrenal de éste estaba supeditada a tener que sustentar la carne a través del alimento, esto implicaba un esfuerzo físico que consistía en aquel arduo trabajo de labrar la tierra, sembrar la semilla, cosechar los alimentos y así poder alimentarse, y de esta forma sustentar su vida con el pan hasta que la carne se consuma y vuelva al polvo del que fue tomado.

      Salmo 104
      15  Y el vino que alegra el corazón del hombre, El aceite que hace brillar el rostro, Y el pan que sustenta la vida del hombre.


      (El pan, haciendo alusión al alimento general en sí) Pero tal condición, al hombre le representaba un fastidio, tener que trabajar y consumir sus fuerzas para sostener su carne, sabiendo que de todos modos al fin y al cabo vuelven al polvo del que fueron tomados, para algunos esto quizá no tenían mucho sentido, si se pudiera evitar bueno sería, pero sin embargo no había opción, había que trabajar para obtener el pan que sustenta la vida en la carne solo por un corto tiempo.

Job 7
1 ¿No es acaso brega (luchar, reñir, forcejear, trabajar afanosamente) la vida del hombre sobre la tierra, Y sus días como los días del jornalero?

      Si nos detenemos a pensar por un momento esa forma de vida al día de la fecha no ha cambiado, la vida de los hombres sigue siendo esa constante lucha de tener que trabajar para conseguir el alimento diario que sustenta la vida en la carne, y no solo eso, sino que a esto se le ha sumado el hecho de sostener el confort de vida que uno elije, que en la mayoría de los casos va de la mano con la avaricia, porque el anhelo natural del hombre es querer amontonar riquezas, tener muchas posesiones y servicios confortables de forma desordenada. Pero esa forma de vida está totalmente desaprobada por Dios.

Lucas 12
15  Y les dijo: Mirad, y guardaos (abstenerse) de toda avaricia (afán desordenado de poseer riquezas para atesorarlas); porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee.

      Pero así estaba la vida de los hombres en el tiempo de la manifestación de Jesucristo como el Mesías, en aquella constante lucha y afán de tener que trabajar para sustentar la carne, conseguir el alimento diario. Y unos más que otros esperaban al mesías, pero la imagen que se habían hecho del mesías era como la de Moisés, porque hasta ese entonces el máximo referente de la religión judía era Moisés, como el siervo fiel de Dios, por medio del cual Dios había hecho grandes señales, que hasta antes de Jesucristo eran prácticamente insuperables, la máxima expresión de señales y prodigios de Dios para ellos fue la que opero en Moisés, al punto tal que esperaban que el Mesías sea en cierta forma una especie de Moisés, alguien por medio del cual se hagan extraordinarias maravillas a favor de todo el pueblo, que sea su líder, que los libere del yugo romano, y a su vez que los alimente así como Moisés alimento a todos en el desierto con el mana y las codornices. Es por ello que la forma de identificar si Jesús era o no el mesías era midiéndolo con Moisés. Y esto se hace claramente visible en el milagro de la alimentación de las cinco mil personas.

      En el milagro de la alimentación de los cinco mil hombres, que en realidad podríamos decir que eran un aproximado de veinte mil personas, a los cuales el Señor Jesús había alimentado, esta señal fue notoria a los hombres de aquel lugar, al punto tal que buscaron a Jesús para que sea su rey, su jefe, su guía, porque entendían que tal líder podía ocuparse de sus necesidades físicas, así como lo hizo Moisés con el pueblo judío en el desierto, (ropa y comida) comprendieron que este podría ser el Mesías, el libertador, el guía, el profeta esperado, entonces luego de ver la señal de la alimentación de tantas personas con tan pocos panes y peces, consideraron quedarse al lado de Jesús porque eso implicaría ya no tener que trabajar por el sustento diario, no preocuparse por el vestido, por las enfermedades, sino que por medio de él serían saciadas sus necesidades físicas, solo había que seguirle, de hecho eso hicieron, cuando Jesús se fue de allí, esta gente le siguió hasta donde Jesús fue, y cuando lo hallaron le dijeron

Juan 6
25  Y hallándole al otro lado del mar, le dijeron: Rabí, ¿cuándo llegaste acá?
26  Respondió Jesús y les dijo: De cierto, de cierto os digo que me buscáis, no porque habéis visto las señales, SINO PORQUE COMISTEIS EL PAN Y OS SACIASTEIS.
27  Trabajad, no por la comida que perece, sino por la comida que a vida eterna permanece, la cual el Hijo del Hombre os dará; porque a éste señaló Dios el Padre.

Jesús reprendió a la multitud, mostrando que su esfuerzo y trabajo en la vida solo consistía en aquel afán desordenado de una satisfacción carnal, es por ello que en Mateo 6 Jesús les expresa, no se afanen pensando que vamos a comer, que vamos a beber, y que vamos a vestir, porque parecía que eso era la única preocupación que tenían, sino que debían buscar el reino de Dios y su justicia, la vida no es solo el alimento físico, el hombre no va a vivir solo del pan, si bien leíamos al comienza que el pan sustenta la vida del hombre esto no significa que mientras comamos vamos a vivir para siempre, sino como lo dijo Dios mismo a Moisés, no solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.

      Mateo 6
      25  Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
     
      33  Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas.

      Mateo 4
      1  Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo.(A)
      2  Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.
      3  Y vino a él el tentador, y le dijo: Si eres Hijo de Dios, dí que estas piedras se conviertan en pan.
4  El respondió y dijo: Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.(B)

Esto a su vez mostraba que ellos habían descuidado el verdadero sentido de la vida, y todas las enseñanzas que Dios les había dado de cómo vivir, estaban preocupados solo en lo exterior, pero su interior estaba totalmente descuidado (su corazón), había una falta de obediencia hacia Dios, sus conciencias les dieron testimonio que habían descuidado la obra de Dios, es por ello que inmediatamente le dijeron:
     
      28  Entonces le dijeron: ¿Qué debemos hacer para poner en práctica las obras de Dios?

      Es como decir: Bueno, que propones que hagamos para ordenar nuestras vidas en obediencia a Dios, como hacemos para no vivir afanado por la comida y sujeto al consejo de Dios.

      29  Respondió Jesús y les dijo: Esta es la obra de Dios, que creáis en el que él ha enviado.
     
      Lo que Dios quiere es que ustedes crean que yo soy el Mesías, el Ungido de Dios, el Libertador, el Cristo, que crean que yo soy superior a Moisés.          

      30  Le dijeron entonces: ¿Qué señal, pues, haces tú, para que veamos, y te creamos? ¿Qué obra haces?
     
      El día anterior habían sido alimentados milagrosamente, ¿y ahora esperaban una señal superior? Pero solo estaban pensando en ellos mismos, eran unos egoístas terribles, estaban buscando poner a Dios a la altura de los hombres y encima que haga la voluntad de los hombres…

      31  Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: Pan del cielo les dio a comer.

      Compararon a Jesús con Moisés, de repente aquella señal milagrosa de Jesús en la multiplicación de los panes y peces ellos buscaron opacarla con la alimentación que Dios proveyó por medio de Moisés a aquellas dos millones de personas en medio del desierto por cuarenta años, (mama y codornices), buscaron condicionar a Jesús, demandando que supere a Moisés con aquella gran alimentación durante cuarenta años,   se podría decir de forma global que la cifra reunida con Jesús era un poco menos que el 1 % de la que estuvo con Moisés y que la alimentación de Jesús solo fue un día y la de Moisés por cuarenta años.

Y seguían pensando solo en la comida, en que alguien se ocupe de su mantenimiento.

      32  Y Jesús les dijo: De cierto, de cierto os digo: No os dio Moisés el pan del cielo, mas mi Padre os da el verdadero pan del cielo.
      33  Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo y da vida al mundo.
      34  Le dijeron: Señor, danos siempre este pan.

      Estos hombres comprendieron que Jesús les hablaba de un pan que otorgaba una vida indestructible, una vida eterna, porque sus padres, por más que comieron el mana y codornices durante cuarenta años, igual murieron, pero aquí Jesús propone un mejor alimento que el mana y codornices, una pan de vida que hace al hombre eterno, tal dadiva hacia a Jesús inmediatamente superior a Moisés. Es por ello que estos cambiaron el mana y las codornices por el pan que Jesús les ofrecía. No titubearon en decirles, DANOS ESE PAN, Y CREEREMOS EN TI

      A lo mejor esperaban que Jesús haga descender del cielo en ese momento aquel pan de vida así como descendió el mana, y que ellos iban a poder comerlo y vivir para siempre y seguir a Jesús. Muy fácil…

      35  Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás.
     
      38  Porque he descendido del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me envió.
39  Y esta es la voluntad del Padre, el que me envió: Que de todo lo que me diere, no pierda yo nada, sino que lo resucite en el día postrero.
      40  Y esta es la voluntad del que me ha enviado: Que todo aquel que ve al Hijo, y cree en él, tenga vida eterna; y yo le resucitaré en el día postrero.
     
      Con esto Jesús da a entender, que él no venía al mundo para solucionar el problema de los hombres en la condición carnal, el no venía a darles una solución respecto de que van a comer o que van a beber o que vestir, que van a estudiar, donde van a trabajar, donde van a vivir, si está bien tener lujos o no. No venía a ocuparse de esas cosas, Jesús no había descendido del cielo para ocuparse del afán y la ansiedad del hombre, sino por el contrario, VENIA A MATAR ESA FORMA DE VIDA e impartir una nueva vida, una que es indestructible.

      Vida que consistía en creer en Jesús como el Mesías, como el Rey, como el Señor del reino de los cielos, como el amo de todas las cosas, como el dueño de la vida, como Dios mismo
     
      48  Yo soy el pan de vida.
      49  Vuestros padres comieron el maná en el desierto, y murieron.
     
      Ustedes tienen como una gran hazaña el hecho de que sus padre comieron el mana, pero de que les sirvió, si igual murieron, para que anhelar aquel pan, que por más que haya bajado del cielo igual no pudieron vencer la muerte, he aquí yo les presento el verdadero pan del cielo, aquel que da vida a los hombres para que vivan eternamente.

      A Jesús no le interesaba saciar de pan a la gente, y ser el rey de ellos y darles de comer todos los días con un solo pan, si al final igual mueren, no se para que anhelaban los judíos una vida así, o un mesías que haga eso, he aquí Jesús les muestra una nueva vida

      50  Este es el pan que desciende del cielo, para que el que de él come, NO MUERA.
     
      54  El que come mi carne y bebe mi sangre, TIENE VIDA ETERNA; y yo le resucitaré en el día postrero.
      55  PORQUE MI CARNE ES VERDADERA COMIDA, Y MI SANGRE ES VERDADERA BEBIDA.
     
      Jesús es el pan de vida, pero no el pan que sustenta la vida en la carne, sino aquel pan que sustenta la vida del alama para la eternidad, a Jesús no le interesa ocuparse de la vida carnal del hombre pensando en que es lo que vamos a hacer, que es lo que vamos a estudiar, donde vamos a trabajar, donde vamos a vivir, EL ES EL AUTOR DE LA VIDA ETERNA, y alcanzar esa vida consistía en creer verdaderamente que Jesús es el Cristo, que en Él estaba la vida, debían creer que Jesús era Dios.

      Tales palabras le parecieron realmente dura a los hombres que le escuchaban, no pudieron soportarla, no pudieron entenderla, porque su mirada de todas las cosas solo era superficial, seguían pensando en las cosas terrenales, aun a sus discípulos les pareció dura, pero para que tengan mejor comprensión del dijo:
     
63  El espíritu es el que da vida; la carne para nada aprovecha; LAS PALABRAS QUE YO OS HE HABLADO SON ESPÍRITU Y SON VIDA.
     
      La vida del hombre, así como la conocemos, y así como la conocen todos los hombres se puede definir como lo expresa Job, solo trabajo y fatiga, para conseguir el sustento de la carne todo el máximo tiempo posible, pero llegados a Cristo, este nos enseña que DEBEMOS MORIR A ESA FORMA DE VIDA que consiste en la afanosa carrera de trabajar para, alimentarse, vestirse, pagar las cuentas, estudiar, ser alguien en la vida, todo que solamente se refleja en la carne, MORIR A ELLO Y NACER DE NUEVO, con una naturaleza espiritual, para lo cual se necesita un alimento espiritual, un nuevo pan, ya no aquel que solo produce muerte, sino aquel que es el pan de vida, aquellas PALABRAS DE JESUS COMO ALIMENTO ESPIRITUAL, JESUS EL PAN DE VIDA, una nueva vida centrada en Cristo, en las cosas celestiales, como primordial tarea, así como en la naturaleza carnal buscamos trabajar para conseguir el alimento para la carne, ahora Jesús enseña que lo primero es trabajar para conseguir el alimento espiritual para el alma, y que haciendo esto lo demás será añadido sin mayor fatiga.

      Juan 3
      5  Respondió Jesús: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de agua y del Espíritu, no puede entrar en el reino de Dios.
      6  Lo que es nacido de la carne, carne es; y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.
     
      Hay que morir verdaderamente a la vida que llevamos antes de venir a Cristo, a esa vida con afán y ansiedad de conseguir el sustento diario, de ser alguien en la carne, hay que morir a nosotros mismos. A  Dios no le interesa sostener una vida carnal en el hombre, una vida llena de afán mundano.

      Romanos 6
      4  Porque somos sepultados juntamente con él para muerte por el bautismo, a fin de que como Cristo resucitó de los muertos por la gloria del Padre, así también nosotros ANDEMOS EN VIDA NUEVA.      

      Andar en vida nueva, no en el sentido carnal, como una segunda oportunidad en la carne, sino en otra vida totalmente diferente a la de la carne, una vida espiritual, con alimento espiritual, con el trabajo que implica alimentarse espiritualmente. UNA VIDA NUEVA, UNA VIDA DIFERENTE…

      Colosenses 3
      1  Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios.
      2  Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra.
      3  Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.

      Nuestra vida ya no pasa por aquel afán desordenado de ocuparse en las cosas de la carne, sino en las cosas espirituales, realmente convertirse a Cristo es justamente eso, CONVERSION, éramos de una forma, ahora somos de otra

      2° Corintios 5
      17  De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

      Las cosas viejas pasaron, estamos en una vida nueva, antes la vida consistía en trabajar para obtener el pan diario para la carne, ahora la cosa cambio, hay que trabajar pero por otro pan, que a diferencia del viejo este produce vida eterna, hay que ocuparse de la vida espiritual, porque es una necesidad.

      VIDA NUEVA, NUEVO ALIMENTO, PAN NUEVO

      Romanos 8
6  Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz.
7 Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden;
8  y los que viven según la carne no pueden agradar a Dios.

Gálatas 5
16  Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne.
17  Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis.

Gálatas 6
8  Porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; mas el que siembra para el Espíritu, del Espíritu segará vida eterna.
     
      1° Timoteo 6
      6  Pero gran ganancia es la piedad acompañada de contentamiento;
      7  porque nada hemos traído a este mundo, y sin duda nada podremos sacar.
8  Así que, teniendo sustento y abrigo, estemos contentos con esto.
9  Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición;
     
      El mensaje no trata de enseñar que el hombre debe abandonar el trabajo, y ser una vago que se dedica a leer la biblia, sino debe abandonar el afán terrenal, los anhelos terrenales, la vanagloria, considerar que si somos peregrinos teniendo sustento y abrigo es lo único que necesitamos, como si fuéramos mochileros, abandonar todo lo que nos causa peso, a fin de poder estar agiles para llegar al final del camino.

      Efesios 4
      17  Esto, pues, digo y requiero en el Señor: que ya no andéis como los otros gentiles, que andan en la vanidad de su mente,
      18  teniendo el entendimiento entenebrecido, AJENOS DE LA VIDA DE DIOS por la ignorancia que en ellos hay, por la dureza de su corazón;
     
      22  En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos,
      23  y renovaos en el espíritu de vuestra mente,
      24  y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.

      Yo he escuchado a algunos predicadores, lobos rapaces, decir que “ya que el Señor no viene pronto” debemos continuar haciendo nuestra vida en la tierra, estudiando para ser alguien en la vida, obtener nuestros logros y superarnos, pero lo vida del cristiano no radica en abstenerse de ser alguien en esta vida solo por pensar que Él ya viene, sino que dejamos de ser alguien en esta vida porque la sencilla razón de que, hemos muerto a esos rudimentos, a esas costumbres, a esos anhelos, tú debes considerar si verdaderamente has muerto al viejo hombre.

      ES HORA DE ANDAR EN NUEVA VIDA, Y COMER DEL NUEVO ALIMENTO, EL CUAL ES CRISTO EL PAN DE VIDA…

      La paz del Señor Jesucristo
      Obrero de la última hora

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